En los primeros años de vida de nuestros hijos son más frecuentes las alergias alimenticias, sobre todo a productos como los huevos, el pescado, la leche y los cereales. Los síntomas más frecuentes en los niños son las diarreas, dolores abdominales y vómitos. Normalmente durante un tiempo de exclusión de consumo de estos alimentos suelen ser tolerados. Con el paso de los años, sobre todo entre los cuatro y los seis años, pueden aparecer las alergias inhalantes, como la alergia al polen y a los ácaros, con una cresta alta de padecimiento durante la adolescencia. Existe una predisposición a que nuestros hijos puedan padecer alergias. Cerca de un 80% de los hijos de padres polínicos tiene tendencia a padecer esta enfermedad, aunque es necesario que el niño entre en contacto con la partícula para sufrir la alergia. Suele afectar desde infancia, reincide cada primavera, y suele remitir con los años.
Algunos consejos.
- Es conveniente que el niño evite correr al aire libre por sitios con vegetación
- No abrir las ventanillas del coche cuando viajamos con niños
- No tener en casa plantas que produzcan polen
- Evitar el uso de aire acondicionado o en caso de usarlos que lleven filtros.
Direcciones de interés.
www.uco.es (Red Española de Aerobiología
www.redestb.es (Sociedad Española de Alergia de Inmunología Clínica)
www.seicap.org (Sociedad Española de Alergia de Inmunología Clínica y alergia Pediátrica)

